La sucursal del infierno.

Hace varios años escuchaba en el radio el título de una canción "La sucursal del Infierno", la que se me quedó grabada (sólo el título, era un corrido de contrabando), y con el calor que hace aquí, me pareció ni mandado hacer para esta ciudad, que como una vez dije, se puede freir un huevo en el cofre de un carro (si no me creen, vayan al Parque Constitución... esteeee... sólo Mita Corleone y Fraulein Oriszchna podrían hacerlo), las calles se ven solas a las 3 de la tarde, en junio y ya estamos a 45 grados centígrados, mis respetos para los albañiles que trabajan al aire libre en estos momentos.
Las altas temperaturas provocan cambios en el cuerpo humano, que podemos clasificar en 2:
Insolación: Alza térmica por factores externos (el calor marca morirás en el caso de Mexicali), la cual altera la capacidad del cuerpo para regular la temperatura, se caracteriza por la deshidratación (se pierde agua para controlar el calor), sequedad de boca y de ojos por la pérdida de agua, lo cual lleva a su vez a la baja de circulación de la sangre, que trae mareo y visión borrosa, en casos eventuales, se pierde la capacidad de sudar y:
Golpe de calor: Si la insolación no es controlada, el alza de temperatura si llega a 40 o más grados centígrados, afecta a los centros nerviosos que regulan la temperatura en el hipotálamo (una glándula en la base del cerebro), que se caracteriza por alteraciones de conciencia que van de letargia al coma, alteraciones de percepción, como las alucinaciones o sensaciones extrañas, aceleración de la frecuencia cardiaca (taquicardia), convulsiones, hasta la muerte en casos graves.
En Mexicali son famosos 2 casos en especial: los 6 ténicos del ferrocarril que se murieron en el desierto de Altar en Sonora en 1940 mientras el ferrocarril Sonora-Baja California era construído, lo cual quedó inmortalizado en la película "Viento Negro", y en 1996 una decisión estúpida de un general Fonseca (infeliz que quedó impune) durante un entrenamiento de rutina, que hizo que 40 soldados se perdieran en la Laguna Salada, al oeste de Mexicali, la zona más infernal del infierno, 15 murieron, los demás se dieron de baja, y compañeros míos en el ISSSTE me platicaron las penosas condiciones en las que llegaron, algunos se quemaron vivos por el sol, fue un crimen estúpido.
Los más susceptibles son los niños, los ancianos, los obesos (la grasa cvorporal es un aislante térmico conveniente en invierno pero fatal en verano), los enfermos crónicos como los diabéticos y los que padecen del riñón; la prevención es lo primario, no salir de casa si no es necesario, tomar mínimo 2 litros de agua al día, uso de ropa clara (los góticos van a sufrir esta temporada), el uso de sal para recuperar la sal perdida en el sudor, el uso del Vida Suero Oral es importantísimo.
En caso de toparse con una persona que tiene un golpe de calor o insolación, primero llevarlo a una parte fresca, bajarle la temperatura con agua fría o con hielo, en especial en axilas, ingles, cuello y cara, que son las partes que más calor irradian del cuerpo, llevarlo a un hospital o de perdida al centro de salud donde nosotros nos encargamos de rehidratarlo con soluciones intravenosas para reestablecer el volúmen de sangre y de valorar su esatdo de conciencia y de circulación.
Generalmente los pacientes responden bien al tratamiento, yo recuerdo una vez en urgencias un viejito de 100 años que se quedó encerrado en casa y que se deshidrató, nos llegó en mal estado, ya en golpe de calor, lo pasé a Observación, mientras le ponían los sueros, mandé al familiar al Oxxo por bolsas de hielo y le pusimos los ventiladores de lleno, llegó con 41 grados, al día siguiente lo ví recuperado y se le dio de alta, ocasionalmente no los sacamos, pero no es común, más común y más triste es la suerte de los indigentes que se encuentran muertos en la calle, este mes van 3, creo que los refugios temporales van a estar llenos este año, ya que apenas va empezando, nos quedan 3 meses por delante y se pronostica el peor verano desde hace 10 años, que vamos a sobrepasar los 50 grados... a ver cómo nos va.